
Buenas amigos!!!! Aquí os dejo un bonito post de nuestro colaborador y colega Chico, un makina en esto de la pesca, espero que os guste y os entretenga como lo ha echo con un servidor!!!
Un saludo y buena pesca!!!!
DORADAS DEL LITORAL GADITANO.
El buen tiempo asoma y las aguas empiezan a calentar. Ya a finales de Marzo se escuchan las primeras capturas de doradas y como no, mi equipo finesse está puesto a punto para intentar verle la cara a la primera rubia del año, esa que tantas horas nos hace estar a pie de playa, aguantando vientos de poniente y de levante, con esa arenita dándote en las piernas, esas calores veraniegas debajo de una sombrilla con el bocata de tortillita de “papas”…pero que después de todo…que alegría nos da ver salir la primera dorada del año por la orilla…
Todas las temporadas comienzan de diferente manera, pero siempre se suele hacer uno las mismas preguntas cuando va llegando el tiempo… ¿Como será la primera?, ¿Empezará la temporada con una pava estratosférica?, ¿Será un día en el que ellas quieran comer y en vez de una sean tres? o mas bien…¿Cuantos ceros me llevare a cuestas antes de sentir al otro lado de mi caña esos cabezazos inconfundibles?,
“benditos cabezazos”. ¿No, Humberto? .
Pues bien, comienza para mi la temporada doradera, y por suerte no muy tardía. Este año, aquí por mis pesqueros de Cádiz, la cosa no ha estado muy mal del todo, sobretodo a principios de temporada, la cosa es que casi todos los peces son de poco porte, mucho zapatilleo como solemos decir por aquí, no obstante me quejo de ello y creo que en parte es debido a tanto trasmalleo que hay últimamente por estas zonas, es obvio que siempre se han visto castigadas por estas artes, pero este año aún más.
Esto de la crisis y el tener que buscarse la vida como uno puede, ha incrementado la salidas de pequeñas embarcaciones y con ello, las redes en las orilllas de nuestras playas y cuando digo orillas es porque a escasos 200 metros he tenido redes caladas, así que supongo que esas doradas de gran porte, las cuales algo mas experimentadas que las pequeñas, creo que se dan la media vuelta al ver los trasmallos y no entran a los comederos, cosa que las esquivas zapatillas e ignorantes del peligro que ello supone, se adentran sin pudor en estos para saciar su hambre, es ahí donde hay que estar para esperarlas…
UN DIA TRAS LA DORADA…
Todo empieza con una llamada de teléfono a mi compañero de trabajo Juanito, que después de varios días de pesca con él y algún que otro bolo, ya estábamos con el mono de dar unos cañazos y como no, de intentar varar en la arena alguna dorada que nos alegrara el día.
Camino de el pesquero y no sin antes la parada obligatoria para surtirnos de buen cebo, como americanos, titas y muergos, ya le comentaba…”hoy es el día Juan”, él me decía que sí, pero no muy convencido del todo ya que esa misma frase se la había dicho en otras salidas anteriores y no nos habíamos comido una rosca.
A LOS LIO…
Ya estábamos en el tajo y casi sin mediar palabra para no perder tiempo, teníamos las cañas montadas en sus pinchos y los cebos preparados y anzuelados para volar hacia su destino, todo hacia presagiar que sería un buen día, la ausencia de ruamen y el agua clara me hacían pensar que esta vez si sería el día del extreno.
Sentados bajo la sombra de mi sombrilla y con el primer bocadillo en las manos, la Top hibrid 30, se queda tiesa como un palo, “¡¡Juán esa caña tiene pescao!!”. De un salto me levanto y cuando tanteo la caña, un par de cabezazos delatan a la que podía ser la primera del día, después de un par de carreras en la orilla, una bonita zapatona de poco mas de un kilo salía del agua.
La cosa empezaba animarse, ya se había señalado la primera y según mis experiencias en esta playa, aún no habíamos llegado a la hora clave. Nuevamente cebo al agua y a continuar la espera, cuando vuelvo a mi butaca, el bocadillo estaba empanado de arena gracias al levante, así que “vamos a por el segundo”.
Después de terminar la comilona, decidimos revisar las cañas para ver como andaba la cosa de ruamen, y “bingo”, los cebos perfectos y cosa buena, ya que por lo menos sabíamos que estábamos pescando, aunque un poco lamiosos por el tiempo que llevaban en el agua, por lo que la mejor opción sería volver a poner cebos nuevos y hacer llegar estos en perfecto estado a la bienvenida pleamar que tan bien funcionaba por esta zona…
LA SEGUNDA POR LA PUERTA ASOMA…
…mirando el reloj y ya estabamos en la hora clave. La intriga de ver un buen dobléz en una caña siempre está presente, pero cuando llega el momento «pleamar» aún más. Pasaba ya un cuarto de hora de esta cuando el milagro vuelve a suceder…y esta vez por derecho. La Top Hibrid 33 se dobló sin piedad y el salto de la butaca también fue por derecho. Mientras que corría hacia la caña, los ojos se me iban para la bobina del carrete que se quejaba como hacia tiempo que no veía.
Unos cuantos metros salieron hasta que no llegué a ella. Con el corazón en la boca y la caña en la mano, me dí cuenta que esta sí, esta era de las buenas, los cabezazos y las arrancadas de hilo que estaba dando eran de una buena dorada.
Poco a poco y sin apurar el 0,16 se fue entregando y sin antes dar sus ultimas carreras en la orilla con la ayuda de las pocas olas que había, terminó varada en la arena una preciosa dorada de las que gustan, de las que te dan oxígeno para hacer un par de ceros mas.
Unas cuantas fotos mas para inmortalizar el momento y de nuevo a dar el cañazo en busca de otra rubia.
Esta vez le tocaría a Juan, una bonita picada y nuevamente una zapatona nos alegraba la vista y el estreno del compi.
NO HAY DOS SIN TRES…
Ya con una par de horas de bajada y con la pesquerita hecha, dábamos por satisfactoria la jornada de pesca, pero aún este día me deparaba otra sorpresa. De nuevo la misma caña se me volvía a doblar y por consiguiente provocar ese calambre en el estomago como si de la primera vez que veía una picada se tratase, cosa que creo que por muchas que vea y mucho tiempo que pase, me seguirá ocurriendo.
Esta no sería como la segunda, pero a falta de doradas, buenas son zapatillas, así que bienvenida sea la tercera de mi cuenta particular.
Unos cuantos de lances mas sin éxito y dimos por concluida una jornada de pesca que para los apuntes queda y otro comienzo de temporada doradera en el litoral gaditano distinto a los demás.
Un saludo a todos y aquí estaré para próximas jornadas de pesca!!
Aqúi os dejo el video de la más entraita en carnes!!!
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